Técnica
canalización venosa
Canalizar por una vía venosa, es considerado una técnica invasiva, ya
que permite tener una vía de comunicación con el Sistema vascular de una manera
permanente. Es a través de esta técnica que se pueden administrar sueros
(sueroterapia), medicina (medicación) y nutrientes de una manera directa a
nuestro cuerpo, mediante el Sistema vascular o circulatorio.
Cuando de canalización se
habla se ocupan los siguientes elementos:
A.-
Para la canalización:
- batea y/o mesa auxiliar
- esponja jabonosa y toalla
-empapador
- compresor
- catéter endovenoso (con sistema de
seguridad), del calibre adecuado.
- válvula antirreflujo
- tira adhesiva de 1 x 10 (esparadrapo)
- gasas estériles
- solución antiséptica: clorhexidina
acuosa al 2% o alcohol 70%, o en su defecto povidona yodada al 10%
- apósito quirúrgico estéril 5 x 9 cm.
- guantes no estériles
- contenedor de material punzante y otro
contenedor para material usado
Además
de este material que es el principal para comenzar la canalización, se necesita
el complemento, que es el material encargado de contener y ser el medio para
ingresar las sustancias necesarias en el cuerpo del paciente, a continuación
las enumerare:
B.-
Para sueroterapia continua:
- sistema de infusión que incluya llave
de tres pasos y alargadera de 20 cm.
- suero a perfundir
- pie de gotero
- tiras de esparadrapo para fijar el
sistema de infusión.
- Ampolla monodosis de suero salino 0,9
%
- Jeringa de 2cc
¿Qué venas?
Cuando
se presenta la técnica de canalización, te preguntaras, ¿Qué vena es la que
debo elegir?
Bueno,
como regla primordial, se debe escoger el abordaje venoso en la zona más distal
posible.
Existe
además la canalización venosa periférica y la canalización venosa central.
La
canalización venosa periférica, va en lo que es el:
Dorso de la mano, la ventaja de dicho
procedimiento es que daña en un mínimo el árbol vascular (conjunto de venas),
pero el calibre de catéteres son de un diámetro menor en esta área, además de
que el movimiento en esta zona se ve reducido.
En
el antebrazo es muy cómoda y el flujo del contenido es muy constante, pero se
dañan más las venas de esta zona.
En
la flexura del codo, los calibres de catéter son más amplios ya que permite que
sean de mayo circunferencia, además de que la canalización en esta área es
sumamente fácil, el inconveniente aquí es que las venas se dañan muchísimo, y
el flujo del contenido varía según la posición del brazo.
En
la canalización venosa central
Existe
la vía braquial, es de fácil abordaje, tiene mínimos riesgos, pero hay mayor
incidencia de trombo flebitis irritativa por el roce del catéter con la íntima
del vaso.
La
subclavia
Tiene la ventaja de tener buen flujo de
sangre.
Y poca incidencia de trombo flebitis irritativa. Algunos de los inconvenientes con esta vena es la posibilidad de complicaciones graves durante la
colocación; como neumotórax.
La
yugular interna, Se suele preferir la derecha por su calibre algo más grueso y
su trayecto algo más corto y directo hacia la vena cava superior, tiene la
ventaja de tener buen flujo de sangre y poca incidencia de tromboflebitis
irritativa. Algunas desventajas de esta son la punción accidental de la
carótida, difícil fijación a la piel ya que se encuentra ubicada en el cuello
el cual presenta gran movilidad.
Femoral,
tiene la ventaja de fácil acceso en maniobras de RCP, pero algunos de sus
inconvenientes es las fácil infección bacteriana ya que es una zona séptica, y
una alta incidencia de tromboflebitis aséptica.
Ahora
que tenemos o sabemos los distintos tipos de canalización mediante un catéter,
consta de la situación en la que nos encontremos durante nuestra práctica
profesional, para saber que técnica de canalización es la más adecuada para la sobre-vivencia del paciente, ya que como se puede constatar, todas tienen una
ventaja, pero también todas tienen una desventaja, así que la situación será la
que dicte que técnica es la más adecuada para con nuestro paciente.